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Foto AP/Maria Lysaker
Thomas Musinski disfruta de la sombra de un árbol mientras las temperaturas aumentan en Houston el miércoles 10 de julio de 2024. Millones de residentes, incluido Musinski, se quedaron sin electricidad después de que el huracán Beryl tocara tierra.
Los hospitales en el condado de Harris y sus alrededores están experimentando un aumento en el número de pacientes relacionados con el calor después de que el huracán Beryl arrasó la región y provocó cortes de energía generalizados.
Según el Departamento de Salud de Houston, los hospitales de los condados de Harris, Montgomery y Fort Bend trataron a 318 pacientes con insolación, agotamiento por calor y debilidad muscular. Esta cifra es de lunes a jueves por la mañana.
Esto es tres veces el número promedio de personas que buscaron tratamiento por insolación la semana pasada.
El Dr. David Peirce, director médico de la ciudad de Houston, dijo que ahora es más importante que nunca que los residentes sean conscientes de los límites de su cuerpo y, lo más importante, sepan cuándo necesitan descansar e hidratarse.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU., los signos de insolación incluyen náuseas, dolor de cabeza, pulso fuerte y rápido y piel húmeda o fría.
Peirce dijo que estaba especialmente preocupado por las personas que trabajan al aire libre.
“Te vas a calentar y deshidratar”, dice. “Pero las personas deben comprender que no se recuperarán rápidamente, especialmente si no pueden entrar a una habitación con aire acondicionado”.
En su punto máximo, más de 2,2 millones de clientes de CenterPoint en el área de Houston se quedaron sin electricidad. Hasta el viernes por la tarde, más de 860.000 personas todavía esperaban que se restablecieran las luces y el aire acondicionado, según el rastreador de la compañía de energía.
Con un índice de calor muy por encima de los 100 grados Fahrenheit en los días posteriores al huracán, dijo Peirce, el riesgo de insolación es alto y los signos de enfermedad pueden aparecer horas después de la necesidad de hidratación y regulación de la temperatura corporal.
“El cuerpo no reacciona inmediatamente a ese tipo de calor y deshidratación”, dijo, añadiendo que se necesitan mucho más que 30 minutos de descanso para recuperarse.
También dijo que sólo uno o dos vasos de agua no son suficientes para mantenerse hidratados con este calor.
“Si pones dos vasos de agua frente a ti y comparas el tamaño de tu cuerpo, notarás que el 70% de tu cuerpo es agua, y esos dos vasos de agua son mucho menos de la cantidad que tu cuerpo necesita. literalmente una gota en el balde”, dijo Peirce.
Destacó que si los residentes tienen que salir cuando hace calor, deben beber más agua y tomar descansos más largos de lo habitual.
“Si realmente no puedes limitar la cantidad de ejercicio que haces en este calor extremo, tu cuerpo probablemente tardará más en recuperarse de lo que crees”, dijo Peirce.
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